La Generación Z está comenzando a abrirse camino en la fuerza laboral o en el mundo del emprendimiento y vienen con confianza, son fuertes y están listos para hacer cambios significativos en el mundo.
¿Eres un joven emprendedor o conoces a uno en este momento?
Durante los años que lleva en operación Novaera, hemos conocido a varios jóvenes que optaron por la ruta del emprendimiento después de concluir sus estudios universitarios en lugar de buscar un empleo.
Hemos visto estudiantes recién graduados con una pasión e ideas incomparables sobre cómo construir un negocio. Estos jóvenes emprendedores están marcando el camino hacia un futuro económico que aún está por verse.
Aunque crear una empresa a una edad temprana es emocionante, hemos identificado algunos errores críticos en este proceso.
Aquí hay cuatro errores que los jóvenes emprendedores tienden a cometer, junto con algunos consejos que pueden beneficiarte y a tu startup.
1. No poder definir tu startup.
Muchas startups se encuentran con este problema porque parece que nunca pueden definirse a sí mismas ni lo que ofrecen. Debes intentar concentrarte en el producto o servicio más crítico que sabes que se venderá. Cuando te mueves demasiado, cambias tus objetivos comerciales y giras constantemente, no estás en modo de startup, estás en modo de lluvia de ideas. No crees un negocio con la esperanza de que algo se ponga de moda repentinamente entre tus clientes potenciales. Puede que tengas una gran idea, pero debes comprender las necesidades del mercado y cómo puedes resolver esos problemas.
2. No conoces a tu audiencia.
No saber quién es tu audiencia y no estar seguro de si existe.
Si no has realizado ninguna investigación de mercado o no estás seguro de si tu producto o servicio resuelve un problema, “te toparás con pared”. Debes investigar, salir y hablar con la gente para que puedas comprender y apreciar lo que el mercado comprará y lo que no comprará, respectivamente. Tómete tu tiempo, envía encuestas y comparte tus ideas con los demás. Comparte tus ideas con familiares, amigos y mentores de confianza para obtener comentarios importantes.
3. Tu huella digital necesita una limpieza.
Si creciste “en línea”, lo más probable es que no utilices las redes sociales con fines comerciales. Si eres un joven emprendedor, probablemente pases mucho tiempo en línea usando aplicaciones de redes sociales para comunicarte, compartir actualizaciones personales y publicar fotos. Sin embargo, usar estas aplicaciones no significa que sepas cómo usarlas para los negocios. Usar las redes sociales para negocios es significativamente diferente a usarlas para la comunicación personal. Debes entender cómo mantener cada mundo en su propio espacio. Revisa todas tus cuentas de redes sociales y asegúrate de eliminar todo lo que no sea halagador. Tu huella digital puede tener un impacto crítico en ti y tu negocio. Mantén tu nueva presencia en línea de manera profesional, elimina cualquier imagen inapropiada y comienza a construir tu nuevo perfil comercial a través de plataformas como LinkedIn.
4. No tener un mentor.
Tener un mentor en el mundo del emprendimiento es una de las cosas más importantes para una startup. Un mentor exitoso puede guiarte, enseñarte y brindarte apoyo. Además, esta persona puede ayudarte a aprender cómo y cuándo tomar riesgos, brindar orientación y comentarios comerciales críticos, así como respaldar tu salud mental. Construir un negocio no es para los débiles de corazón, y es fundamental que cuentes con un sólido sistema de apoyo. Hay mucho que aprender sobre negocios y contar con el apoyo de la persona adecuada puede marcar la diferencia.
En Novaera hemos hablado con muchas personas que han querido incursionar en el mundo del emprendimiento pero nunca han tenido la oportunidad, o estaban demasiado asustadas o se dieron cuenta de que era demasiado tarde para entrarle al juego.
Si tienes las ganas de emprender, recuerda que en Novaera te podemos apoyar y orientar para que tu idea de negocio despegue.
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